Superhéroes made in Spain, de Movistar+

El éxito comercial de las películas de superhéroes es incuestionable y apabullante, copando los rankings de las películas más vistas del año (e incluso de la historia) desde hace más de una década. Además, el género de superhéroes ha crecido y se ha expandido más allá del cine, creando un entramado empresarial a su alrededor con tufo a monopolio. Siendo los cómics de DC y Marvel la principal fuente de tramas para esta explosión pijamera, el documental Superhéroes made in Spain de Movistar+ (guionizado por Raquel Santos y producido por Ruth Mediodía Martín) propone explorar la influencia de los autores españoles de cómic en la industria estadounidense.

La relación del autor patrio con el cómic de superhéroes USA se retrotrae hasta el gran José Luis García-López a finales de los 70, aunque podría establecerse un claro punto de inflexión en la irrupción de Carlos Pacheco, Pascual Ferry y Salvador Larroca a principios de los 90 en Marvel, asentando el trasvase de creadores que dura hasta hoy. El autor de cómic español en la actualidad está en un nivel de consideración nunca visto anteriormente y los grandes logros comerciales en USA van acompañados del favor de la crítica y las editoriales. Nombres como David Rubín, David Aja, Emma Ríos, Gabriel Hernández Walta o Santiago García (por citar unos pocos) se han establecido en el imaginario popular estadounidense como años atrás surgían los Sienkiewicz, Windsor-Smith o McFarlane y su presencia en medios y redes sociales es cada vez más notable.

Por ello seguramente, Cristina Teva empieza entrevistando al mediático Salva Espín, genial en su arte y sus respuestas. En el documental se entrevistan a más de 10 autores españoles relacionados con el mercado estadounidense (Belén Ortega, Andrés Guinaldo, David López, Aneke, Pepe Larraz, Rodrigo Zayas o los mencionados Larroca y Pacheco) y desde la primera entrevista con Espín se ve clara la parcialidad del guión, inclinado indisimuladamente hacia la vertiente cinematográfica de los superhéroes (en contraste con la labor de sus invitados). Es palpable el poco interés del documental en la industria del cómic incluso en el montaje,  ilustrando las conversaciones con metraje de las películas de Marvel y DC/WB de fondo. Ni siquiera se introduce a los autores resaltando sus mejores obras, más preocupada la entrevistadora en saber cuál es su película favorita de superhéroes.

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Más allá de focalizar el guión en la irrupción del género de superhéroes a escala global y masiva (un tema ciertamente interesante y muy debatido), se echa de menos haber profundizado más en temas técnicos y artísticos en los que los invitados habrían podido aportar muchísimo (la relación con los editores y editoriales, los plazos de entrega, el libreto de estilo y continuidad, la distribución de tareas en la cadena de producción, la cesión de derechos…). Siempre hay algunos apuntes interesantes sobre cómics en todas las entrevistas, aunque se diluyen ante la mayor atención otorgada a los superhéroes del celuloide. Aunque se intenta paliar esta falta con la visita al ESDIP (Escuela Superior de Dibujo Profesional de Madrid) y las entrevistas a algunos alumnos ilustrando (vagamente) el proceso de creación de un cómic, la sensación de haber desaprovechado la ocasión nos sigue embargando.

Quizás el defecto más grande de todo el documental es el intento de resaltar la relación directa entre las creaciones de los autores patrios en Estados Unidos con las superproducciones de Hollywood. Idea que dista bastante de la realidad (desgraciadamente). De los artistas invitados, seguramente el que más cerca ha estado de una de estas realizaciones ha sido Carlos Pacheco (agradecido en los créditos), pero nunca al nivel de un Jeph Loeb, Robert Kirkman o Jim Starlin (esperemos que la influencia de David Aja en la próxima serie de Hawkeye en Disney+ sea consecuentemente aclamada). La información que poseían los invitados sobre las películas no sería nunca revelatoria para el espectador, aunque el guión haya tratado de esconderlo. Para ahondar más en esta idea, por ejemplo, podría haber sido interesante invitar a Víctor Santos, cuya serie Polar ha sido adaptada a Netflix bastante fielmente y el autor ha tenido un papel relevante en la producción. O a Santiago García y Pepo Pérez con el Vecino, también con una relación directa con la realización. Otra ocasión desaprovechada.

Sin embargo, el debate sobre el feedback entre las películas de superhéroes y la industria del cómic de superhéroes es muy interesante. ¿Quién es el gran beneficiado de esta interacción? ¿Suben las ventas de los cómics que han sido versionados por Hollywood? ¿Saben las dos grandes editoriales USA capitalizar el éxito de las películas? ¿Son los cómics los nuevos storyboards de la industria del celuloide? ¿O se han convertido en simple merchandising al servicio del gigante cinematográfico? Un debate que no aparece en el documental y sobre el cual, probablemente, los autores invitados tenían una opinión fundada al respecto. Incluso se podría haber aproximado la discusión desde una vertiente más artística, opinando sobre el tipo de adaptaciones que se hacen de los cómics (más libres como en Marvel/DC o casi literales como los casos de Watchmen, Sin City o 300). Poca profundidad sobre este tema (otra vez)

Más allá de un gran acabado visual y técnico (y de ponerles cara a algunos autores españoles), el documental Superhéroes made in Spain no aporta nada novedoso sobre la relación cómic-cine. Tampoco consigue llamar la atención del espectador no versado en cómic hacia los geniales mundos de fantasía que se pueden encontrar abriendo los tebeos de superhéroes publicados mensualmente (y desde hace más de 80 años) en Estados Unidos. Una pena haber desaprovechado la presencia de estos titanes de la historieta para preguntarles sobre sus preferencias sobre el cine de superhéroes. Con este documental no se atraen nuevos lectores al noveno arte; los medios audiovisuales generalistas todavía tienen mucho trabajo por delante para entender las necesidades del mundo del cómic.

¿A quién le puede interesar?

A los followers de StripMarvel y a aquellos más interesados en el MCU que en los cómics en los que se basan las películas. Hay interesantes pinceladas sobre el camino del artista de cómic hasta el mercado editorial estadounidense, pero no son el tema principal del documental.

Disponibilidad

Se estrenó en Navidades de 2019 y todavía puede verse en Movistar+ durante las próximas semanas.

Sinopsis oficial

En este programa de 50 minutos presentado por Cristina Teva conoceremos la trastienda del mundo de la ilustración de cómics de superhéroes y sus adaptaciones al cine. Son los propios dibujantes españoles los que nos cuentan su experiencia con las grandes editoriales, Marvel y DC. Salvador Larroca, Carlos Pachecho, Salva Espín, Pepe Larraz y un largo etcétera nos hablan de las curiosidades que encierra su trabajo y de sus personajes fetiche, como Lobezno, Spider-Man, Capitana Marvel o Daredevil.

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